¡Hola a todos!
Bienvenidos a mi Blog, soy Rajae y en esta primera entrada, vamos a hablar de la aportación de la tecnología en la enseñanza de lenguas extranjeras.

A menudo se suele calificar la tecnología como perjudicial y
peligrosa, pero en mi opinión es una
herramienta más, que si le das el uso adecuado le puedes sacar muchísimo partido.
La tecnología ofrece diferentes recursos de aprendizaje de
idiomas a los que pueden acceder donde y cuando quieran por todo el mundo. Los
estudiantes ya no están obligados a seguir las lecciones cara a cara, ya que
pueden acceder a lo que necesitan en línea y luego utilizar sus habilidades
practicando en persona. Esto ofrece mucha más flexibilidad y, a su vez,
más personas están aprendiendo idiomas, debido a que pueden hacerlo en el horario
que más les convenga. Todos aprenden a su propio ritmo, por lo que el uso
de herramientas y recursos tecnológicos también puede ofrecer cierto alivio a
los estudiantes que pueden ser más tímidos o introvertidos, así como un espacio
para que los estudiantes se sumerjan más profundamente en los cursos y temas en
los que quieren enfocarse. Los recursos en
línea también ofrecen la posibilidad de interactuar con nativos del idioma que
se desee, aunque estén en diferentes puntos del mundo.
Las ventajas que tiene la tecnología en el aprendizaje de
idiomas no están solo en estudiar a distancia, sino también en el aula:
Son excelentes para agregar variedad a las lecciones, lo cual
es bueno cuando se atiende a una variedad de estilos de aprendizaje. También
permiten un mayor nivel de independencia en el aula ya que los estudiantes tienen
los recursos para buscar cosas por sí mismos. Hay numerosos estudios que
afirman que el aprendizaje se vuelve más efectivo cuando se ilustra, en
comparación con la enseñanza con letras, sobre todo cuando se enseña a niños ya
que muestran mayor entusiasmo cuando se utiliza tecnología digital.
La tecnología ocupa un lugar
importante en la vida de los estudiantes. Cuando no están en el aula, casi
todo lo que hacen está relacionado de alguna manera con la tecnología. Por lo tanto, el uso de la tecnología para
aprender un idioma a menudo se puede integrar fácilmente en la rutina diaria de
un estudiante. Se pueden realizar 10-15 minutos de práctica de un idioma
fácilmente entre el uso de las redes sociales y la navegación por Internet; darles a los estudiantes
oportunidades adicionales para comunicarse en el idioma, es muy motivador.
¡Gracias por leerme!
Rajae